Como les conté, James vino a pasar unos días a Madrid. Y para 'celebrarlo' su madre preparó una cena en familia:
-Su vuelo llega las 5: 40 pm. ¿ Vienes al aeropuerto?- Marie estaba emocionada.
- No. Mejor nos vemos luego.- estaba nerviosa.
- Ok. Mami dice que a las 9:00 pm te quiere aquí. Se ha pasado todo el día cocinando.
Llegué a casa de doña Sophía( si ella me oye me mata) a la hora establecida. Y cuando entré vi a Marie en la cocina:
- Como siempre tan puntual.- una gran sonrisa iluminaba su cara.- James está en la sala, ¿no vas a saludarlo?
- Claro. Solo... estaba... viendo qué hacías- estaba tan nerviosa, que apenas podía moverme.
Fuí a la sala con una sonrisa. Ahí estaba Sophía, con su esposo.
- Hola, querida! Estás muy linda, mi niña- me dio un fuerte abrazo.
- ¿ Como está Sophía? Hola Sebastián.
Miré a mi alrededor, con disimulo, pero no vi a James.
Dejé mis cosas en la antigua habitación de Marie y fui a la cocina para ayudarla.
-Hablé con los muchachos para que salgamos todos esta noche.
Entre esos ' muchachos' estaba Liam.
- Qué bien! ¿ Invitaste a Isaac( su ex) también?
-¿ Quién es Isaac?- James estaba en la puerta de la cocina.
¿ Cuánto tiempo llevas ahí?- le preguntó Marie.
- Lo suficiente. No me saludas- dijo tomándome de la mano.
Empecé a reír, y lo abracé suavemente.
- Ya te echaba de menos- me susurró al oído. Y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo.
- Y eso es todo!¿ Ni un beso?- exclamó Marie.
La cena fue muy divertida, porque James y su padrastro no dejaban de hacer bromas.
Después, nos encontramos con los chicos y nos fuimos al centro, a tomarnos algo.
- Joan, Carlos. Este es James, mi hermano.
- Un placer conocerte al fin. Tu hermana no para de hablar de ti.
No sé si recuerdan a Carlos. Él me llevó a casa cuando conocí a la 'mujer' de Liam.
- Es un placer verte de nuevo- Carlos es encantador.
Parecía que los chicos se conocía de toda la vida. No juzgan y critican tanto como las mujeres.
- Liam, ¿ te acuerdas de mi hermano?
Él me miraba fijamente. Y de pronto desvió la mirada hacia James:
- Claro! Como no hacerlo después de ese ''diciembre de alcohol''- los dos empezaron a reír.
Liam me saludó con normalidad, con dos besos como es costumbre en España.
Nos fuimos, por fin, a un local cubano muy famoso en Madrid, donde hay música en directo.
Pasamos un rato más que agradable, pero todo lo bueno se acaba.
- Voy a dormir en casa de mami. Ven Desy, y te quedas con nosotros.
- No. Tu sabes que prefiero dormir en casa. Hablamos mañana.
- ¿ Are you sure? -preguntó James, pero él sabe que cuando me decido por algo, nadie me hace cambiar de opinión.
Me despedí con un beso y me subí al auto con Carlos y Liam.
Conversaba con Carlos, cuando Liam dijo con cierto sarcasmo:
- Wao. Hace falta que venga el hermano de Marie para poder verte.
- El milagro es verte a ti. Ademas hizo falta que tuvieras un hijo para para que te quedaras tranquilo.
Puede considerarse un golpe bajo, pero él se lo buscó.
Cuando llegué a casa observé que tenía una llamada de James.
- Hola. ¿ qué ocurre?
- Nada, solo quería comprobar si habías llegado bien ( oh que dulce) ¿ Ya estás en casa?
- En casa, sana y salva.- él soltó una carcajada.
- Que descanses, cariño.
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